El ministro de Asuntos Exteriores de Guinea Ecuatorial, Agapito Mba Mokuy, dijo el 21 de noviembre, en la inauguración de la Reunión de Ministros de Asuntos Exteriores, en la IV Cumbre África-Mundo Árabe, desarrollada en Sipopo (Malabo), que ésta "refleja la buena evolución de la cooperación entre países de África y del Golfo Pérsico".

La reunión de jefes de Estado y de Gobierno se celebrará el próximo día 23, y congregará a 66 líderes de las dos regiones, "demuestra que la asociación África-Mundo Árabe sigue y seguirá adelante", afirmó Mba Mokuy en su discurso.

Al recordar que el continente africano está "avanzando firmemente hacia el desarrollo económico, político y social", afirmó que tal cooperación abre esperanzas y oportunidades para el cumplimiento de los objetivos de desarrollo que África intenta alcanzar.

También ha manifestado que 2010, la II Reunión Afroárabe de Libia fue una etapa que "había atizado la llama al convertirse en la fase de gestación del embrión de nuestro gran partenariado"; al tiempo que la III Reunión Afroárabe de Kuwait en 2013 sirvió para que los compromisos de ambas regiones sigan adelante, resultando así un gran hito para el porvenir del partenariado.

Según el ministro, esta cumbre de Malabo puede ser considerada como un punto de inflexión decisivo en la vida de esta alianza: "Es tan decisivo como crucial, dada la combinación actual marcada por la persistencias de las tendencias inflacionarias endémicas, que coinciden con una recuperación lenta, pero gradual del precio del barril de petróleo".

Asimismo ha recordado que la situación actual ha desacelerado la ejecución de planes de desarrollo de las economías africanas, "notablemente debido a la poca capacidad de resistir los choques externos".

Sin embargo, pese a las crisis económicas corrientes, "una diagonal del contexto global confirma que esta gran alianza entre África y el Mundo Árabe sigue controlando una buena parte de la inversión directa del mundo".

Para Mba Mokuy, "África sigue teniendo una enorme necesidad de capital, que nos permitirá continuar impulsando y llegar a nuestro potencial de crecimiento"

Por otra parte, reconoció que las puertas del crecimiento económico global “siguen en África, mientras que una buena parte de las fuentes de financiación necesaria para ese crecimiento se encuentran en el mundo árabe".

Por último, concluyó que el "proceso de Malabo debería habilitar esta alianza afro-árabe para alcanzar su propio desarrollo". 

Texto: A. A.
Fotos: Clemente Ela Ondo Onguene (DPGWIGE)
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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