El Presidente y la Primera Dama en la Misa de Acción de Gracias por el Día de la Mujer
marzo 08, 2010
El Día de la Mujer en Malabo tuvo dos testigos de excepción: el Jefe del Estado, Obiang Nguema Mbasogo, y la Primera Dama, que asistieron a la Misa de Acción de Gracias que se celebró en la Catedral de Malabo, evento con el que se inauguró la alegre celebración del Día de la Mujer en la capital ecuatoguineana.
Cientos de mujeres vestidas con el tradicional “uniforme” del Día de la Mujer, además de invitados de honor, como embajadores de diferentes países, gran parte de los miembros del Gobierno, participaron, junto al Jefe del Estado y la Primera Dama, en el solemne acto religioso con que se abrió este día en que la mujer es la gran protagonista.
La ceremonia religiosa se ofició en la Catedral de Malabo, que no pudo acoger a todo el público congregado allí. Por eso, muchas mujeres esperaron en la puerta del templo a que acabase la ceremonia para saludar a la pareja presidencial, y comenzar su recorrido en el tradicional desfile de la mujer.
El Jefe del Estado y la Primera Dama, Constancia Mangue de Obiang, llegaron sobre las diez a la Catedral y, tras saludar a las cientos de mujeres allí congregadas, que no habían podido acceder a la iglesia, asistieron a la misa. Durante la homilía, el sacerdote que oficiaba la misma hizo alusión a la necesidad de combatir definitivamente la violencia contra la mujer, que es la principal temática con que se celebra este año el día en Guinea Ecuatorial, y subrayó la necesidad de que la mujer ayude a una sociedad mejor: “Ha llegado la hora de que la mujer adquiera una importancia y peso en la sociedad que no ha tenido hasta ahora”. En la primera fila de los presentes, cerca de la pareja presidencial, también se encontraba el Primer Ministro, Ignacio Milam Tang, así como la Ministra de Asuntos Sociales y Promoción de la Mujer, Eulalia Envó Bela.
El buen ambiente se respiraba también a la salida de la Catedral, donde el Presidente y la Primera Dama posaron junto a algunas de las personalidades asistentes, y posteriormente también, con el grupo de jóvenes empleados de la nueva Biblioteca Nacional de Malabo, casi todo chicas. La Primera Dama escogió este año un amplio vestido camisero, con una original manga con un peculiar diseño nido de abeja abierto, y en color blanco.
Reportaje: Oficina de Información y Prensa de G. E.