La misa ha tenido lugar este pasado fin de semana en la parroquia de la Sagrada Familia de las Naciones Unidas, en la ciudad de Nueva York.

Tras las explosiones registradas el día 7 del pasado mes de marzo en el Cuartel Militar de Nkoantoma, en la ciudad de Bata, la Misión Permanente de la República de Guinea Ecuatorial ante las Naciones Unidas se ha sumado a los múltiples homenajes que todas las capas sociales de nuestro país están llevando a cabo en honor a las víctimas de este triste acontecimiento, mediante una solemne misa que ha estado encabezada por los Representantes Permanentes, el titular Anatolio Ndong Mba y la Adjunta, Victoriana Mbasogo Mangue.

La eucaristía ha sido presidida por Monseñor Gabriele Giordano Caccia, Nuncio Apostólico de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, quien ha rogado a Dios por el eterno descanso de las víctimas, tanto militares, como civiles de esta tragedia, así como por el Gobierno y pueblo de la República de Guinea Ecuatorial, sin dejar atrás a todos los países y organizaciones internacionales que, con marcado espíritu de solidaridad, acudieron a apoyar a nuestro país.

El prelado también ha rezado por los religiosos, los militares, los sanitarios y por todos aquellos que de alguna manera directa o indirecta han ofrecido su simpatía y apoyo a las víctimas y familiares afectados.

A dicha misa han asistido también varios embajadores y personal de otras misiones permanentes acreditadas ante la ONU.

Texto y fotos: José Enzeñ Obiang (Agregaduría de Prensa en la Embajada de Guinea Ecuatorial en la ONU)
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

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